Contenido ofrecido por:

Algunos de los partidos más emblemáticos de la historia de la selección española de fútbol tienen protagonistas ligados a Huesca. Viajemos en el tiempo a la final de la Eurocopa 64. Ese mozo de flequillo que comandaba el flanco izquierdo de la selección era Carlos Lapetra, la gran joya del fútbol oscense y aragonés.
No menos emblemático fue el 12-1 contra Malta en 1983. En la foto de aquel día histórico aparece Francisco Buyo, que fuera portero del Huesca en la temporada 1978-79, cedido por el Deportivo mientras realizaba el servicio militar.

Pero en junio de 2003 nos acercamos de verdad, porque la ciudad enloqueció con la llegada de la selección española sub-21 para jugar un partido de clasificación contra Grecia. La convocatoria levantó una gran expectación. Allí había futuras estrellas como Víctor Valdés, Reyes, Arteta o Fernando Torres.

A toda velocidad se acometieron reformas en El Alcoraz. Banquillos, asientos, iluminación. Nada podía fallar. La televisión y más de 90 periodistas acreditados serían testigos.

El partido también trajo a la ciudad a un famosísimo «canterano» del Huesca. Su lugar no era el césped sino la grada. Manolo había dado sus primeros golpes al bombo en El Alcoraz. Años después, en el Mundial 82, donde recorrió 15.000 kilómetros haciendo autostop, unió su figura de forma definitiva a la selección.
Volvía «Manolo el del bombo» a casa con 6 mundiales a sus espaldas y la ilusión de un niño: «Siempre he pensado que ojalá pudiera animar algún día a la selección en Huesca. Este partido es la ilusión más grande de mi vida, porque hace 36 años que empecé allí, y regresar para una ocasión así es lo máximo. Sé que hay un ambiente buenísimo, que El Alcoraz va a estar lleno y estoy convencido de que la gente responderá con sus ánimos para pasar un día grande», declaró.

El día del partido no cabía un alfiler. Los aficionados llevaron en volandas a los sub-21, que vencieron por 2 a 0 a los helenos. Algarabía general, palco repleto y buenos deseos del mundo del fútbol (que se cumplirían muy pronto, con la escalada del club a la élite).

El entrenador de aquella selección era Juan Santisteban, el técnico con más títulos internacionales con las diferentes categorías inferiores de la selección. Como entrenador, su camino y el del Huesca ya se habían cruzado en una ocasión. Fue en 1978, cuando Santisteban dirigía al Castilla y se encontraron ambos conjuntos en la 2ªB.
Y siguiendo el hilo de las coincidencias, ¿quién era el preparador físico de aquel Castilla que jugó en El Alcoraz? Jesús Paredes, que ocuparía mucho tiempo después, en 2009, el mismo puesto de preparador físico en la Sociedad Deportiva Huesca. Jesús Paredes llegó con un bagaje inigualable, ya que venía de ser uno de los impulsores de la era dorada de la selección española, como ayudante de Luis Aragonés en el recordado triunfo en la Eurocopa 2008.

De nuevo con Manolo el del Bombo en la grada y con la serenidad de haber visto tantas cosas, El Alcoraz volvió a vibrar con el amistosos de la selección sub-21 frente a Noruega. Muchos ojos estaban puestos en Sergio Gómez, exjugador y promesa emergente del fútbol español. Unos meses después todo el mundo se acordó del seleccionador Luis de la Fuente, que ahora comanda a la absoluta.

En la cantera hay vínculos con las selecciones base. El primero es Raúl Ferrer, que el 25 de mayo de 1991 debutó con la Sub-19 en el mítico estadio de Wembley. O como Hugo Anglada, una de esas promesas que augura que la conexión oscense con la selección nacional va a ser duradera.

Fuente:
El Huesca. 100 años de fútbol (Tropo Editores, 2010)
Hemeroteca Diario del Altoaragón
«Manolo vuelve a casa y estrena bombo» (Diario del Altoaragón, 6-6-2003)
«La década que viene» José Antonio Martín Petón (Diario del Altoaragón, 6-62003)
«Huesca y Selección, 2 – Grecia, 0» (Diario del Altoaragón, 7-6-2003)

Fotografías;
Diario del Altoaragón

Contenido ofrecido por: