8.000 kilómetros para conocer El Alcoraz
Steve y su familia recorrieron los casi 8.000 kilómetros que separan Oklahoma de Huesca para conocer un estadio y un equipo de fútbol humildes, y su investigación del fútbol español, los trajo hasta El Alcoraz este sábado, al partido que enfrentó a la SD Huesca con la SD Eibar. Los seis miembros de la familia Russell, perfectamente uniformados, se sentaron en las gradas del estadio oscense como unos aficionados más, dispuestos a empaparse del ADN azulgrana.
“Estamos de viaje por España y, entre otras cosas, queríamos ver un partido de fútbol profesional, pero queríamos huir de los grandes estadios y los equipos más mediáticos y conocer el fútbol más real, más cercano. Así que nos pusimos a investigar entre los equipos de la liga española y nos llamó la atención la SD Huesca”, explica Steve.
Su viaje por el país les llevó de Madrid a Barcelona y de ahí, a la provincia de Huesca, donde visitaron el Pirineo, “nos ha encantado la zona de Torla y Ordesa”, decían. Y el recorrido por el Alto Aragón, terminó este pasado sábado en El Alcoraz. Aquí cumplieron su objetivo de ver un partido de fútbol profesional.
“Nos ha llamado la atención la amabilidad del staff del club, desde el personal de seguridad a todos los que hemos conocido”. Y añadía, “también el sentimiento de comunidad que se respira en el ambiente, se nota que el fútbol está muy metido dentro de la vida social de la ciudad”.
Amantes del deporte, del fútbol americano y el “soccer”, los Russell vuelven a Oklahoma con las maletas cargadas de experiencias y buenos recuerdos, y la SD Huesca ha ganado unos nuevos seguidores al otro lado del charco. Y quizá, quién sabe, un futuro jugador. “Acabo de decidir que, si el Manchester United no me ficha, jugaré en el Huesca” se despidió el pequeño de la familia.
